Ya sabéis que las parábolas eran pequeñas historias que contaba Jesús para que la gente entendiera mejor su mensaje.
Había una vez un judío que iba de Jerusalén a Jericó, iba caminando tranquilo, cuando, de repente, un grupo de ladrones le atracó, le golpeó, y le dejó tirado en el camino.
Unos minutos más tarde, un sacerdote caminaba por el mismo sitio y notó al hombre tendido en el suelo. ¿Sabes qué hizo? Pensarías que corrió a ayudar al hombre. En lugar de eso, cruzó y caminó por la otra orilla, actuando como si no hubiera visto al hombre.
Aproximadamente una hora más tarde, otro hombre, un levita, caminaba por el mismo lugar. Los levitas eran personas que ayudaban a los sacerdotes en su trabajo. Probablemente ayudaría al hombre. Pero ¿sabes que hizo? Caminó más despacio, acercándose un poco al hombre, pero luego siguió caminando sin ayudarlo.
Solo unos minutos después, otro hombre pasó caminando. Era un samaritano. (Algo que debes saber de los samaritanos es que no les agradaban a los judíos. Los judíos usualmente no trataban a los samaritanos muy bien, así que nunca se llevaban bien). El hombre que estaba muriendo al lado del camino era un judío. Así que, ¿Qué crees que hizo el samaritano?
Pues, tan pronto como vio al hombre, fue donde estaba y sintió compasión por él. Le puso vendajes en sus heridas y echó aceite y vino (que eran muy costosos) en las heridas para evitar que empeoraran. Luego levantó al hombre y lo puso en su propio asno, y lo llevó a un hotel para cuidarlo.
Al día siguiente, el samaritano, pagó al posadero para que el hombre pudiera quedarse en el hotel hasta que estuviera lo suficientemente bien como para irse.
Cuando Jesús terminó de contar la historia, preguntó: "¿Cuál de los tres hombres fue el prójimo del hombre herido?"
Pincha en el siguiente enlace, y podrás ver y escuchar la historia:
https://www.youtube.com/watch?v=5gmpSmFYpRg
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